"Estaba sentada mirando al mar cuando de repente tú llegaste por atrás. Pusiste tu mano en mi hombro y me sobresalté, ni te había escuchado llegar. Ni siquiera esperaba que vinieras. Sólo estaba mirando al mar sentada en la ventana, justo como tú decías que harías: me pasaría horas y horas mirando el mar. No sé si lo que quería era sentir las olas o tan sólo recordarte de esa forma. Entonces me puse en pie, con las piernas temblando, e intentaba mirarte como siempre, como un simple amigo. Pero tú, una vez frente a mí, me miraste de una forma diferente y sólo esa mirada fue la señal. Mi señal. La que llevaba esperando tanto tiempo... la que pensé que nunca llegaría."
Y así es como te has convertido en simples sueños para mí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Críticas y comentarios